Interesante el trabajo que han hecho ingenieros japoneses al crear un robot de 2.6 gramos que anteriormente pesaba tan solo 10 gramos, esta basado en la mecánica de vuelo de las aves y es posible controlarlo por medio de un censor infrarrojos.

Con sus cuatro alas este robot puede simular perfectamente el vuelo de un colibrí y puede alcanzar una altura de 10 metros sobre la superficie y con una autonomía superior a 6 minutos.

La empresa de tecnología AeroVironment que es la que lo fabrica, ganó recientemente un contrato de 2,1 millones de dólares para desarrollar nano vehículos aéreos (NAV). Financiado por la DARPA (unidad de investigación avanzada del Pentágono), pertenece a uno de los muchos proyectos de Defensa orientados a la robótica.